Se descalzaba lentamente, mientras su frialdad caía de forma brusca por su espalda.
Nunca consiguió describir aquello.
Cuando lo creía resuelto, una nueva ecuación salía de detrás del lapicero.
Y se tatuó muchas frases en el corazón.
Borró recuerdos, y se hizo una funda de hierro macizo.
Nada servía cuando se trataba de olvidarlo a él.
No hay comentarios
Publicar un comentario